Artículos, leyendas y noticias sobre los vampiros y el vampirismo.
América es una tierra llena de leyendas pobladas de innumerables seres, entre los cuales no podían faltar los vampiros. Estos, variados y originales en cuanto a su naturaleza, van desde un anciano bonachón con sombrero plateado y sonrisa permanente, hasta una terrible y poderosísima serpiente alada, capaz de crear olas con sus alas y de congelar a sus víctimas con la mirada antes de chuparles la sangre. Y es que, si bien es cierto que América no es el continente con más vampiros ni con los vampiros más horrendos, sí presenta la particularidad de tener una de las más exóticas faunas hematófagas.
Asia no tiene tantos vampiros como Europa, pero en cambio cuenta con los más aterradores, tales como el penanggalam de Indonesia, cuyo aspecto es el de una fiera cabeza femenina que surca los aires con apenas la columna vertebral y los intestinos, que flotan y brillan por las noches en que sale a cazar sus víctimas; o el polong, que se origina cuando se meten los pedazos de carne de alguien asesinado en una botella, manteniéndolos allí hasta dos semanas tras las cuales se realizan hechizos y se conjura a un demonio...
A continuación les presentamos una lista con todos los principales tipos de vampiros originarios del folclore europeo. Y es que Europa es el continente de los vampiros por excelencia: es allí donde se originó la leyenda del Conde Drácula y otros vampiros nobles como el Conde Estruch, y donde casi en cada región hay un tipo particular de vampiro, como los upir rusos con sus colmillos de hierro y sus encías ensangrentadas, o los alp alemanes que se cuelan en los sueños eróticos de las mujeres para drenarles algo más que la tranquilidad...
Akasha, reina del Kemet, el primer reino anterior al Egipto de las pirámides y los faraones, fue la primera en convertirse al reino de la noche, cuando Amel, un espíritu amante del sabor de la sangre humana se introdujo en su cuerpo, fusionándose con su corazón y transformando su cuerpo por completo, dándole la muerte para que la sangre ajena le diese la vida, transformando su carne en autentico mármol con el paso de los siglos, otorgándole fuerza para sobrevivir a los mortales, colmillos para beber la sangre de la yugular que Amel tanto desea, como moneda de cambio por la inmortalidad.
"Me dispongo a relatar un sueño que supuso un curioso descubrimiento. Una noche, en lugar de la voz que solía escuchar en la oscuridad, se alzó otra voz, temible y tierna, que decía:
-Tu madre te advirtió que desconfiaras del asesino.
En ese mismo instante, la habitación que se hallaba a mi alrededor se iluminó de improviso y vi a Carmilla de pie, junto a mi cama, con su camisón de noche empapado en sangre." (Joseph Sheridan Le Fanu - Carmilla)
Desde la antigüedad las leyendas de vampiros han estado presentes en todas las civilizaciones, Mesopotamia, Sumeria. En el antiguo Egipto se temía a un misterioso pájaro "bebedor de sangre" que representaba la reencarnación de algún ajusticiado injustamente reencarnado en esa forma para atacar durante las noches a los hijos de sus asesinos.
A pesar de la creencia general de que el vampirismo, tal como lo entendemos habitualmente, procede de Transilvania, ya existía una leyenda en el condado de Ampurias (actual Ampurdán), en el siglo XII situado en la antiguamente llamada Catalunya Vella (es decir, aquella que durante la invasión musulmana no fue sometida a las hordas invasoras y permaneció cristiana), donde tuvo lugar la más escalofriante de las historias de nosferatus o estrugas, palabra ésta derivada de estriges.
El desaparecido Joan Perucho ideó en su "LES HISTORIES NATURALS" las aventuras de un vampiro de la vieja escuela llamado Onofre de Dip. Sin embargo, en este bello pueblecito del Baix Camp (Tarragona) nos encontramos con una leyenda real de vampirismo, los dip, los perros vampiro que dieron nombre al mismo.
Los vampiros, aunque algunas personas no lo crean, son personajes que pertenecen exclusivamente al mundo de la ficción. El más famoso de todos ellos es el Conde Drácula, que fue creado por el escritor Bram Stoker y que ha generado numerosas adaptaciones cinematográficas que van desde el terror al humor. Ha corrido mucha tinta sobre este personaje y parece que existe un cierto consenso sobre el hecho de que esté inspirado en un personaje real: Vlac Tepes, un príncipe rumano del siglo XV, cuyo sobrenombre Drácula era debido a que era hijo de Vlac Dracul. Aunque la historia muestra que este príncipe resultó un tanto sanguinario, conocido también como "el empalador", desde luego no era un vampiro.
Un equipo de investigadores italianos sostiene que ha encontrado los restos de una vampira en Venecia, enterrada con un ladrillo encajado entre las mandíbulas para evitar que se alimentara de las víctimas de una plaga que azotó la ciudad en el siglo XVI. Matteo Borrini, antropólogo de la Universidad de Florencia, ha señalado que el hallazgo, situado en una pequeña isla de Lazareto Nuevo, en la laguna de Venecia, apoya la teoría de que en tiempos medievales se creía que los vampiros eran los responsables de la propagación de plagas como la Peste Negra.
A pesar de ser este uno de los casos de vampirismo mejor documentados del siglo XVIII, no existe testimonio escrito de lo que las supuestas victimas del ataque vampírico vieron al ser atacadas. Además aunque sea cierto todo lo que se cuenta en los informes escritos por el grupo que desenterró el cadáver de Arnold Paole, existen hipótesis medicas que rebaten todas las supuestas características propias de un vampiro en su cadáver, como el crecimiento de uñas, o la sangre brotando de los orificios.
La acción de clavar una estaca a un vampiro no es una leyenda que aparece en la novela Drácula –que recopiló el autor irlandés Bram Stoker en 1897 sobre los cuentos populares de la Europa del Este– o un mito como se ha plasmado en tantas películas de terror, donde los muertos vivientes perseguían a los vivos, sino que el apuñalamiento en el tórax no es ficción, es una realidad. Arqueólogos de Bulgaria han desenterrado dos esqueletos de la Edad Media –de hace 800 años– perforados con barras de hierro en sus pechos. Los han hallado en una excavación al lado de un monasterio en la ciudad Sozopol, junto al Mar Negro.
Esta historia ocurrió en un barrio de Santa Fé capital, más exactamente en una escuela. Estaba entrando al salón de clases cuando alguien mencionó:
¿Dónde esta Gustavo?
Hola mi nombre es Antonio Cruzaley vivo en la ciudad de Mexicali B.C México lo que me pasó a mi tal vez sea difícil de creer, ya que la mayoría de la gente no cree en esta clase de cosas, por eso es que busqué esta página para poder desahogarme. Espero que les guste mi historia y espero que a ni uno de los lectores le suceda.
Sus ojos eran enormes y vacíos carentes de alma
Su sonrisa gigante casi dolorosa y aquel sonido desgarrador
De aquel hacha cortando la piel de aquella pobre víctima.
Siempre me había preguntado que había en el último piso de mi edificio, mas nunca me atrevía a subir.
Una madrugada mientras todos dormían yo no paraba de escuchar pisadas en el piso de arriba lo cual era raro ya que ese piso estaba deshabitado. La curiosidad no me dejaba dormir así que sin dudar me levanté, salí de mi casa y subí las escaleras. Se escuchaba la lluvia caer y el viento soplar.
Cristina Argibay Oujo nos envía este primer capítulo de su novela con formato blog titulada "Los ojos de la muerte". Cada sábado publica un nuevo capítulo así que si os gusta no dudéis en visitar su blog.